No se trata de un proyecto nuevisimo, el barco se presentó hace tres años, pero sus líneas vintage de rara belleza, combinadas con las últimas tecnologías, lo convierten en un barco digno de mención incluso en un salón, como el de París, donde estamos siempre buscando las últimas noticias.

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El Cape Cod, del astillero francés Rosewest, llama la atención por su elegancia. La proa vertical, un gran impulso de popa, la armonía de la plataforma de cubierta, recuerdan las canoas construidas en los primeros años del siglo pasado en Arcachon, un país de marineros y constructores de barcos en esa parte de la costa atlántica francesa con vista al Golfo de Vizcaya.

El Cape Cod representa la celebración de la atención al detalle. Desde las cornamusas hasta los pasacabos, desde la madera sólida que rodea la paramare hasta la teca que se extiende sobre toda la cubierta, todo recuerda las antiguas tradiciones de la armada francesa.

Diseñado por los arquitectos Hervé Nollet y Clément Salzes, tiene un casco hecho de telas laminadas con poliéster y resina de viniléster, mientras que la cubierta presenta un acabado de resina epoxi.

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Las líneas muy elegantes, en navegación parecen mantenerse bastante secas, gracias a un borde libre lo suficientemente alto para sus escasos 9 metros de eslora en general. Con un plan de vela que toca los 70 metros cuadrados, incluida la vela de estay, también es un barco rápido, especialmente cuando se arma el yankee en su largo bauprés hecho de carbono para no hacer pesada la proa.

Otra característica interesante es la quilla que puede inclinarse gracias a un motor eléctrico asistido por una bomba hidráulica. De esta forma, el calado pasa de un metro y medio a 45 centímetros, con la posibilidad de varar. El Cape Cod es el típico barco de salidas diarias, destinado, según declarado por el propietario del astillero, Hervé Nollet, «para transferir al propietario placer instantáneo y sensaciones inolvidables.» Pero sus características ciertamente no le impiden realizar cruceros cortos de pocos días en el espíritu del camping náutico.

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Muy bien pensada, la organización de las maniobras permite una conducción en solitario. Todas las maniobras cumplen su función dentro del alcance del timonel. La escota de la vela mayor, a través del travesaño colocado detrás de la barra, está a la mano, así como las escotas y drizas que alcanzan dos cabrestantes colocados a los lados de la estación de comando.

La cabina es realmente acogedora, con un asiento en forma de U, que permite al timonel asumir las posiciones más agradables, y un sofá más ancho, siempre con una forma envolvente, colocado en frente del árbol.

Internos reducidos al mìnimo, con solo un metro de altura, pero suficiente para conseguir dos literas amuralladas còmodas para pasar la noche.

El barco está homologado para ocho personas, pero sus dimensiones lo hacen ideal para un equipo de cuatro personas que aman el contacto con el mar, experimentado a través de las líneas de otros tiempos de este pequeño velero.

El precio? Incluyendo el IVA, cerca de 94 mil euros para el modelo del modelo básico, incluidas las velas.

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Datos técnicos

Eslora total                 8,96 mt

Manga                        2.73 metros

Calado                        0.45 – 1.45 m

Desplazamiento         1,450 kg

Motor                         diesel 14 cv

 

 

 

 

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